MEMORIAS DE CASTLEVANIA (PRIMERA PARTE)

Desde que tengo memoria, siempre quise tener un Nintendo para divertirme (por lastima, nunca lo tuve). Tenía como 8 años cuando tenia nocion de lo que eran los juegos de video. Eran lo mas sorprendente que hubiera visto en mi vida. Pasaba parte de mi tiempo en arcadias y maquinitas, y veía como juegos clasicos cambiaban en gráficas y jugabilidad. Quedaba muy absorto con el mundo de los videojuegos hasta hoy. Donde quiera que fuera, siempre buscaba arcadias y maquinitas con los cuales entretenerme, buscaba juegos nuevos y raros. No fue hasta que cumplí 10 años cuando llegué a un pueblito llamado Tingambato donde encontré un juego que era muy diferente a los demas.

Yo sabía que habia juegos de Mario, de Street fighter y otros de naves y disparos. Pero este era unico. Era un juego viejo de Nes. Tenía curiosidad y lo probé. En cuanto rodo la moneda por la ranura y empezó el juego, se me imprimió en la mente un recuerdo feliz de mi infancia. Un personaje en pixeles se aproximaba a un lugar lúgubre, lleno de niebla, donde la luz de la luna iluminaba un castillo de miedo, y donde encontraría y enfrentaría los mas espantosos horrores y monstruos jamas imaginados: CASTLEVANIA. El sonido palpitante y ritmico de la musica VAMPIRE KILLER retumbaba con fuerza y energía, el juego era una aventura única. Atravesando obstaculos, eliminando monstruos con un látigo sagrado como un cazavampiros, e internarse en lo profundo del castillo de Drácula. Pero como todo en la vida, nada dura para siempre, y solo duro un efimero momento. No volvería a saber de nuevo sobre el castillo embrujado de Drácula varios años despues.

Cuando tenía 15, veía muchas películas, pero inconcientemente las de vampiros eran mis favoritas. Una de mis favoritas fue DRACULA de BRAN STOKER. En la película mostraban muchas escenas de horror y sangre, pero también mesclaban drama, romance y misticismo cristiano y pagano. El personaje de Drácula era envolvente, y la lucha de los que lo cazaban era una epopeya que te mantenía asombrado. Para ese entonces me gustaba saber sobre la cosmologia y los mitos de los vampiros ya que era un tema muy profundo e interesante. Saber sobre Drácula es esencial para todo fan de castlevania, pero aún en ese entonces no tenía nocion de lo que realmente era la escencia de castlevania.

Al cumplir 17, la era del playstation y nintendo 64 era un boom, y para mi fortuna, hubo varios lugares donde rentaban estas nuevas consolas. En un local que hasta la fecha ya no existe, tenían en exibición varios juegos. Entre ellos Zelda Ocarina of Time y Resident evil 2 eran los favoritos de los que asistían a pasar un rato de esparcimiento. Pero, al igual que años atras, un aullido entre las sombras me llamó. Una portada de un disco en exibición me dejó atónito como un fuerte dejavú: El oscuro castillo emergió nuevamente, esperandome. Era CASTLEVANIA: SYMPHONI OF THE NIGHT. Mi corazón palpitó con fuerza una y otra vez. Lo renté por media hora, pero para mí fue un instante eterno. El cazador de vampiros volvió a terminar lo que dejo pendiente: destruir a Drácula. Pero eso solo fue el inicio, ya que a pesar de sus esfuerzos, el castillo y su amo emergirán una y otra vez. Pero solo está en manos de un vampiro eliminar a Drácula. Una hermosa sinfonía me trajo nuevos recuerdos, mientras enfrentaba con valór las mas oscuras y siniestras pesadillas que se ocultaban en un laberíntico castillo, lleno de hermosas graficas y colores sacados de una pintura artística. Quede en shoc solo al ver la evolución que tuvo su versión de Nes hasta el de Playstation.

Finalmente, logré terminar el juego (gracias a la ayuda y tips de unos amigos gamers). Pero a pesar de eso, sentí que había mucho por recorrer y experimentar, sentía que Drácula emergería de nuevo en un nuevo título. Pero esa es otra historia.